Tag Archives: J.J.López descenso

El descenso de los grandes

Un brillante título de El Gráfico que describió a la perfección el momento que vivía San Lorenzo aquel 15.08.1981. La pena fue desde caballito hasta el San Juan y Boedo antiguo.

Este triste momento de Independiente, rojo pálido, nos remonta a otras situaciones similares. Por eso es bueno recordar lo que ocurrió con los otros tres equipos denominados “grandes” que perdieron la categoría (San Lorenzo, Racing y River) que tienen ciertos puntos de contacto con la realidad de los “rojos”.

Un acongojado Juan Carlos Lorenzo trata de consolar a uno de sus jugadores, aún sobre el césped del estadio de Ferro Carril Oeste. La síntesis del match muestra el resultado que condenó al “ciclón”.

San Lorenzo había sido bi campeón en la temporada 1972 y luego repitió el título en el Nacional1974. Apartir de allí, tanto en el plano deportivo como institucional, la debacle fue haciéndose más notoria. No peleó ninguno de los torneos que disputó y el cierre y posterior desmantelamiento del glorioso estadio de AvenidaLa Plata, marcaron el ápice de esta situación.

Carlos Horacio Salinas vence de penal a César Mendoza y pone el 1-0 de Argentinos sobre San Lorenzo. Sería el resultado definitvo que condenaría al “ciclón” y salvaría a los “bichitos”.

En el torneo de 1980 se salvó del descenso a dos fechas del final, como antesala de lo que vendría. Un año más tarde, comenzó de manera irregular, pero al promediar el certamen nadie podía prever que el “ciclón” lucharía por mantener la categoría. La sucesión de derrotas fue desembocando en aquella jornada final donde quedó cara a cara con Argentinos Juniors. La derrota por1 a0 decretó el descenso, pero marcó (a la larga) el comienzo de la recuperación, porque jugadores e hinchas pusieron en positivo esa mala situación y enla PrimeraBfueron una verdadera sensación, recuperando prontamente su lugar en la elite.

Una de las tantas formaciones de Racing en 1983. En este caso, en campo de Independiente, donde hizo de local en gran parte del fatídico certamen.

Dos años más tarde fue el turno de Racing. La “academia” había tenido su esplendor a fines de los años ´60, con las conquistas de las Copas Libertadores e Intercontinental. La década del ’70 fue de un casi total ostracismo, con un par de torneos donde debió luchar por su permanencia. En 1982 zafó a dos fechas del final, pero la realidad parecía no tener otro camino. Y así fue como una temporada después, al perder como local4 a3 ante Racing de Córdoba, llegó el tan temido descenso.

Con dolor, El Gráfico reflejó el descenso de Racing el 18.12.1983. En medio de una batalla campal entre hinchas y policías en las tribunas, Mario Rizzi se retira del campo de juego con lágrimas en sus ojos.

Muchos pensaron que el regreso sería tan meteórico como el de San Lorenzo, pero la verdad fue que en su primer año en el ascenso, sus irregulares performances y la extraordinaria campaña de Deportivo Español, lo relegaron al octogonal, donde cayó en la final ante Gimnasia. En 1985, al incorporar futbolistas con cierto rodaje en la categoría (Colombatti, Attadía, Wálter Fernández, entre otros), logró el ansiado retorno al círculo superior.

Molina remata y convierte un nuevo gol de Racing de Córdoba sobre su homónimo de Avellaneda. La derrota por 4 a 3 condenó a la “academia” de Avellaneda.

El destino quiso que River, en una soleada pero fría tarde de junio de 2011, manchara su historia con este descenso. Belgrano fue apenas una anécdota de aquel triste momento…

Ahora Independiente. Este Independiente gris, deshilachado, triste y, fundamentalmente, autodestruido, tiene por delante la dura misión de emprender este camino. La ruta será difícil, pero no imposible. Por ahora tiene que pensar que está en el ascenso y esa es su realidad que, en definitiva, es la única verdad.


El más grande…dolor

Una mueca del destino: Desde una foto, el eternamente ganador Ángel Labruna, alza sus brazos festejando un triunfo de su querido River. Ni en su peor pesadilla “Angelito” hubiera pensado que el club de sus amores descendería y, además, conducido por dos de sus más emblemáticos jugadores.

Fue como una confirmación del Apocalipsis no sólo deportivo que desde hacía un tiempo se cernía sobre el cielo de Núñez. Este 26 de junio de 2011 quedará perpetuado en los archivos de los estadígrafos como el primer descenso de River Plate a la segunda división, pero el glorioso club de la banda roja ya venía con el paso vacilante y casi herido de muerte desde un puñado de años atrás.

Si bien tenía tristes mojones en su historia (por ejemplo el anteúltimo lugar de 1983), esta pérdida de categoría es como el fondo de un envase que supo estar lleno de éxitos y que ahora está vaciado y sólo lleno de soledad.

Daniel Passarella y Juan José López formando con sus compañeros del gran equipo de River de fines de los ´70 y comienzos de los ’80. Detrás, una bandera que es un símbolo del principal foco a donde le han apuntado a ambos: cierta vinculación con Boca Juniors.

Hasta 2005, fue un equipo que siempre estaba en la pelea grande, participando de Copa internacionales, pero desde allí, lentamente, comenzó este tobogán deportivo. Con la, por lo menos, errante conducción de José María Aguilar se encadenaron los primeros eslabones de esta cadena de desaciertos, con su ápice con el último puesto del Apertura 2008. Antes de dejar su cargo, cuando arreciaban las sospechas sobre su conducción, dejó una frase para la historia: “River es Aruba”…

El título del Nacional 1979, una de las tantas gloriosas jornadas que compartieron como futbolistas Daniel Passarella y Juan José López. Ubicada en las antípodas de lo vivido en la negra tarde del 26.06.11.

Como una tormenta tropical, típica de este lugar, el club fue sufriendo el arrasamiento de todos sus estamentos, que la llegada de Daniel Passarella ala Presidenciano pudo evitar. Quien fuera un extraordinario jugador y buen entrenador, no estuvo a la altura de las circunstancias. Equivocó las decisiones con los entrenadores, al contratar a Ángel Cappa y, una vez cesanteado este, confiar en Juan José López, a quien le pesaban complicados antecedentes en diversos equipos en su lucha por no descender.

El almanaque y las efemérides también parecen ponerse en contra de este momento de River. Hace 15 años (26.06.1996) Enzo Francescoli eleva hacia el cielo la Copa Libertadores, consagrándose campeón del certamen por segunda vez en su historia.

Los errores se han multiplicado y todos son responsables. Desde mi óptica, la conducción del club (dirigentes y cuerpo técnico) equivocaron la visión sobre la apremiante situación, creyendo que se podían salvar del descenso con el plantel que tenían (casi sin refuerzos), con el peso de la camiseta y confiando en las malas campañas de sus rivales. Nada de esto sucedió y lo que si acaeció fue algo inédito para la historia del fútbol argentino: que el grato nombre de River Plate ahora se instale en el fútbol de ascenso.

 


Las “grandes” salvadas del descenso

Víctor Marchetti festeja alborozadamente uno de los goles con los que San Lorenzo venció a Tigre por 3 a 1 en la anteúltima fecha del Metro 1980 y que le permitió salvarse del descenso.

Boca Juniors lo vivió en el campeonato de 1949, cuando a una fecha del final del certamen (descendían los dos últimos) estaba con 25 puntos, superando sólo a Huracán (24) y tenia una unidad por encima a Tigre y Lanús. En esa última jornada, los “xeneizes” superaron a los “granates” por 5 a 1 en la “bombonera” y lograron, de ese modo, escapar al peligro de caer en la divisional de ascenso.

Las posiciones finales del torneo de 1949 muestran claramente la situación que vivió Boca Juniors hasta el epílogo del certamen.

Luego de vivir su época de esplendor sobre fines de los ´60, la década siguiente comenzó de manera irregular para Racing, pero en el Metropolitano 1976 realizó una pésima campaña. Luego de la fase de grupos inicial, por el puntaje obtenido allí, los equipos fueron ubicados en zona “Por el título” y “Por el descenso”.

El arquero Alejandro Leone y dos futbolistas más de Racing se retiran cabizbajos del estadio de Avellaneda, luego de perder un partido dentro de la pésima campaña del Metropolitano de 1976.

La “academia” cayó en esta última y recién se salvó de perder la categoría, una fecha antes de terminar en mini torneo, que decretó la pérdida de categoría de San Telmo.

El mini torneo “Por el descenso” agrupó a los 10 equipos de peor rendimiento en la fase de grupos. La posición final de Racing, apenas un punto por sobre el único descendido San Telmo, exime de mayores comentarios.

Un año después, pese a incorporar a Julio Ricardo Villa en una suma varias veces millonaria, el rendimiento fue similar al del certamen anterior. Pudo quedarse en primera al vencer a Platense en la última fecha. Además del citado futbolista, había otros destacados en aquel plantel dirigido por Alfio Basile: Agustín Cejas, Rubén Glaria, Guillermo Trama, Rubén “panadero” Díaz, Carlos Squeo y Daniel Killer.

Un plantel de buenos futbolistas, en el que fue el primer ciclo de Basile como técnico de Racing, llevaron adelante una muy floja performance en el Metro 1977. Bonus track: la indumentaria Depor Hit (que ya tendrá su lugar en fuera de stock).

San Lorenzo había sido bi campeón en 1972 y había obtenido en Nacional de 1974 de la mano de Osvaldo Zubeldía. A partir de allí, como en un imaginario tobogán, comenzó a padecer todo tipo de penurias, tanto deportivas (pésimas campañas, escaso surgimiento de futbolistas de las inferiores) como institucionales (problemas económicos, pérdida del histórico gasómetro de AvenidaLa Plata). Esto desembocó en un flojísimo certamen de 1980, donde sólo pudo “respirar” en la anteúltima fecha, superando a Tigre en campo de Huracán. Fue apenas el anticipo de lo que viviría 12 meses después…

La mezcla de experiencia (Villar, Pena, Marchetti) con juventud (Osvaldo Rinaldi, Perazzo, Insúa) no le dio resultado a San Lorenzo. Los descendidos fueron 3 y el “ciclón” terminó apenas por encima de ellos.

Como antesala del descenso que sufriría en una temporada más tarde, Racing tuvo un muy mal certamen en 1982. Fue el último torneo que se disputó sin promedios y logró su salvación una jornada antes del final, igualando con Instituto en Córdoba. En 2008, ante Belgrano de Córdoba, ya en la era de las promociones, volvió a mirar de cerca el descenso, pero zafó sin perder ninguno de los dos partidos.

Último torneo, Metro 1982, donde no se utilizaron los promedios. Sarmiento descendió, Unión y Quilmes fueron al desempate y Racing apenas un punto por encima de ellos…